El Consejo Nacional Electoral y los representantes de las organizaciones con fines políticos y de los candidatos y candidatas presidenciales efectuarán, este sábado 25 y domingo 26 de noviembre, la auditoría pre-despacho sobre el 0,5% de las máquinas de votación para comprobar la calidad de la programación o alistamiento de las máquinas de votación que se utilizarán en la elección presidencial del 3D.

El objetivo fundamental de la auditoria es verificar si existe discrepancia entre la intención de voto del elector plasmada en el comprobante de votación, con lo que se registra en las  actas de escrutinio emitidas por las máquinas de votación y los resultados que registra el Centro Nacional de Totalización (  CNT).

Para realizar esta auditoría previa, mejor conocida como “error 0”, los auditores harán una réplica, de manera controlada,  de las fases de votación propiamente dicha; es decir, se simularán los actos de votación, transmisión y totalización, lo cual representará, además, un ensayo de los procedimientos que se llevarán a cabo en la auditoría posterior al proceso electoral -así como de la duración de su ejecución -, lo que también permitirá adecuar y ajustar los procedimientos respectivos.

160 máquinas servirán de muestra en la auditoría

La auditoría se efectuará sobre 0,5% de las máquinas de votación que se utilizarán a nivel nacional el 3D, es decir que serán auditados 160 equipos, seleccionados a través de una muestra aleatoria estratificada, en acto público, con presencia de representantes de partidos políticos, observadores nacionales e internacionales y medios de comunicación, durante la auditoría de producción de las máquinas.

La auditoría pre-despacho se efectuará en el galpón de Filas de Mariches, y la muestra a utilizar fue seleccionada durante el proceso de alistamiento o programación de las maquinas de votación, en presencia de los testigos políticos.

Auditoría en equipo

El procedimiento para auditar la calidad y funcionamiento de las máquinas de votación requiere, en principio, de la conformación de equipos de trabajo, pues de acuerdo con los parámetros metodológicos establecidos por los especialistas, es necesario conformar equipos de auditoría, cada uno de los cuales estará integrado por los auditores designados por el CNE, los representantes de los factores políticos y,   opcionalmente, por testigos y observadores debidamente acreditados.

A cada equipo de auditoría le serán asignadas un respectivo número de máquinas de votación, en las que se ingresarán hasta 100 votos combinados.

Por cada dos equipos de auditoría, habrá un supervisor, quien estará encargado de asignar las máquinas de votación, vigilar que el trabajo de sus equipos fluya sin inconvenientes y resolver cualquier duda o problema que surja durante la evaluación. Al final, el supervisor recogerá las actas de auditoría previa, junto con todo el material producido, para posteriormente entregarlo en la mesa de coordinación para su debida trascripción y procesamiento.

Además, se contará con un equipo para la coordinación de todo el proceso, que incluye la totalización y el posterior cotejo con la información transmitida al Centro Nacional de Totalización, el equipo estará conformado por los asesores externos del CNE y los supervisores antes mencionados.